Anteriormente a este asentamiento medieval también encontramos un asentamiento ibérico de primera categoría cuyos orígenes, hasta donde se tiene constancia, se remontan a la Edad del Bronce. Y es por esa razón por la que nombro éste lugar, porque he pasado muchos días en verano como voluntario haciendo prácticas de arqueología y rescatando la historia de estos lares.
Pero la finca de Villadiego también alberga aún numerosos secretos, pues algunos investigadores afirman que en sus inmediaciones hay ruinas romanas.
El proceso de elaboración de sus quesos se da por completo en el interior de la finca, ya que la alfalfa de la que se alimentan sus ovejas y con las que a posteriori proporciona la materia prima para fabricar sus quesos, es cosechada en la propia finca ubicada a orillas del río Guadiana. Es posible que esa cercanía a las aguas de este río y la alimentación de las ovejas por medio de pastos irrigados le aporte esa suavidad al sabor de sus quesos, que a mi particularmente me sorprendió en la variedad del queso curado.
http://www.quesosvilladiego.com/
